Menstruar y entrenar: NO es igual para todas las personas

Escuchar a nuestro cuerpo es la mejor manera de complementar la rutina y el periodo.

Si estás leyendo esto, es porque de seguro más de una vez te has cuestionado qué hacer con tu rutina de ejercicio cuándo te llega el periodo. Y lo más probable es que has escuchado algún consejo por aquí o por allá que te ha hecho sentido.

Lo cierto es que no todas las mujeres lo viven igual. Los ciclos hormonales son una montaña rusa: eternos, cortos, dolorosos, tranquilos, terribles, insoportables, como un pestañeo… y un sinfín de adjetivos más.

Bueno, para entender qué hacer con tu rutina mientras estás menstruando, lo primero que debes hacer es entender cómo funciona el periodo para ti.

Esto por que sí, existe un impacto positivo en el desarrollo de actividad física mientras menstruamos y eso es gracias a las endorfinas que liberamos. Algo muy importante teniendo en cuenta que durante nuestro periodo también vivimos cambios en nuestro humor y ánimo. 

Entonces, si el ejercicio nos ayuda con nuestros dolores menstruales y nos logra devolver un poquito de felicidad, practicarlo es de mucha utilidad. Y funciona, de verdad que sí, para muchas personas.

Además, también debemos considerar la cantidad de herramientas que ahora tenemos para olvidarnos que si quiera estamos menstruando: tampones, copitas, calzones… las opciones ahora son múltiples y podemos encontrar la que nos haga sentir más seguridad.

Sin embargo -y por esto hablábamos recién de descubrir cómo funciona nuestro propio periodo-, lo más importante siempre es escuchar a nuestro cuerpo.

Pero… ¿si odio la regla?

Está bien si odias tu periodo. Si esos días no quieres hacer nada, solo quieres tumbarte y hacer uso de tu guaterito, es perfecto. Tener en consideración que los ciclos menstruales son diferentes para todas las personas es algo clave, y por muchos consejos que nos puedan dar, solo por experiencia descubriremos como es el propio.

Por ejemplo, si nos forzamos a ejercitar durante el periodo porque así lo hemos escuchado, probablemente no haya liberación de endorfinas suficiente que nos haga sentir satisfechas a la hora de ir a dormir. 

Y ojo, muchas veces suele ser una locura. Hay meses donde la regla nos baja como si nada, y de pronto llega un mes donde no queremos ni estornudar. Es común, es normal. Y lo importante es entender que no estamos siendo más débiles por tirar la toalla durante una semana y decidir no practicar nuestra rutina.

Al final, eso también es parte de cuidarnos, querernos y protegernos. Conocer nuestro cuerpo, escucharlo y entender cuándo podemos y cuando no, es un acto de amor muy preciado. ¿Lo pones en práctica ya?

Comparte con tus amig@s

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Más contenido como este